Félix Albo | #lunesdeperita · ESTRO
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#lunesdeperita · ESTRO

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#lunesdeperita

Cada semana una nueva historia rondando a una palabra concreta.

 La definición la tomamos de la página oficial de la rae.es.

La sugerencia de la palabra de algún texto leído, o susurrada por el aire o leída en el twitter de @raepoetica,

 Es para ti, para mí, para quien tú quieras.

Compártela con quien creas que le puede interesar.


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ESTRO

Del lat. oestrus ‘tábano’, ‘locura’, ‘inspiración poética’, y este del gr. οἶστρος oîstros.

1. m. Inspiración ardiente del poeta o del artista.

2. m. Mosca parda vellosa, cuyas larvas son parásitos internos de mamíferos. Hay varias especies, que atacan a distinto tipo de ganado, como el estro de la oveja, del buey, etc.

3. m. Zool. Período de celo o ardor sexual de los mamíferos.

 

 

NOCHE DE PAISAJE · félixalbo

Miro tu ombligo. Lo miro con detenimiento; en silencio. Miro tu ombligo y me imagino descender por él, diminuto yo, mínimo, con mis cuerdas y mis mosquetones; me lanzo a adentrarme en tus íntimos adentros desconocidos y seductores. Me cuelo sin miedo y joven en ti. Dispuesto a perderme para siempre. Y a todo.

Miro tu ombligo, esta vez desde fuera, y miro el paisaje que le rodea.

Es un mapa. Un mapa inmenso. Uno de los de antes, de piel tatuada de sendas apenas imperceptibles que permiten recorrer todo tu cuerpo sin accidentes abruptos. Un mapa sin tesoro porque el regalo ya está ahí. Aquí; en la mirada que desde mis ojos a tu cuerpo acaricia la piel de seda y arena que te envuelve, te contiene. Suave y lenta. Aromada de ti. De ti.

Allá queda tu ombligo ahora, y llego a tu pecho que sube y baja como la marea cálida de un mar tranquilo. Y me quedo un rato, mecido por la canción de tu dormir lento. Me quedo. Aquí un rato. Y miro ahora tu cuello, y tus labios. Y resoplas el viento que guardas dentro. Y levantas los brazos, de repente, como si fueras molino.  Molino enorme, mas aún que gigante. Molino de tu viento que llevas, molino de mis sueños que traes y me mueles dulce. Y me quedo parado porque siempre fui más Sancho que Quijote. Sancho enamorado, enharinado en tu pecho que me mece tierno, hasta que despierto.

Me levanto. Me busco en el espejo del baño. No se me nota por fuera pero tengo todo el cuerpo despeinado.

Me acuesto; cierro los ojos; vuelvo a ti. Desde mí vuelvo a ti. A tu mapa. A tu viento. A mi sueño.

Y allí te encuentro. Y vuelvo a leerte. Y vuelvo. Y en ti me quedo.


La ficción es un espacio de libertad, sin medida, sin doma, sin culpa, sin sentido. 
#Abrazosacapazos.  
Félix Albo

P.D. la semana que viene más.
P.D.1. la de la semana anterior aquí.


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