#lunesdeperita · nadie

#ldp · NADIE

De nadi.

1. pron. indef. m. sing. Ninguna persona.

2. pron. indef. m. sing. Ninguna persona importante o con autoridad para algo.

Es de noche. Has desplegado tu cuerpo sobre la arena de la playa; en la primera orilla, esa que separa la arena seca de la arena húmeda.  El agua queda no demasiado lejos. Tu espalda sobre la arena, sobre ti el cielo negro, esparcido de estrellas menudas. Tu cuerpo está molido. Un día de mierda. Un abismo a tus pies y un día de mierda.

Tus brazos en cruz, con las palmas hacia abajo. Las piernas estiradas ligeramente separadas, tus pies de punta a la noche, descalza también. Los ojos abiertos se empapan de negro, negro lleno, negro todo, negro negro. Los cierras y te das cuenta de que guardas la noche dentro, y mirándola te das cuenta de la caricia que le está dando la arena a tu espalda. Te sientes como parte de ella. Y entonces el mar decide no quedarse fuera, y se cuela por tus oídos, y te invade por la nariz, y te llenas. Te dejas llenar sin saber qué queda dentro o qué fuera.

Y caes. Dentro de ti. Estás dentro de ti, en un lugar exacto, que tiene el hueco exacto entre el planeta entero y la noche inmensa. Estás dentro de ti y tu inmensidad es como la del universo entero, tu profundidad como el mar entero, y tu solidez como toda la tierra. La sensación es ingrávida y segura. Flotante y serena. Placentera. Eterna. El tiempo se ha detenido. Para ti. Tu tiempo ya no es sino tú. Esto eres tú. Así lo sientes. No hay nadie cerca. NADIE. Pero tienes la extraña sensación de que no lo necesitas. Tú te vales. No necesitas nada.

Eres enorme por dentro aún siendo prácticamente insignificante por fuera. Y aquí estás; te esperas, te encuentras, te escuchas, te respiras, te gozas. Aquí eres y estás. Ahora. Sonríes. Te sientes todo y nada, sin importarte, porque tienes la certeza de que siempre te tendrás, porque tú, solo tú eres para ti. Para nadie más que esto que estás siendo ahora. Piensas que esa sensación debe ser como la muerte misma, y enseguida piensas que también tiene que ser como el propio nacimiento. Y vuelves a sonreír sorprendiéndote al darte cuenta de que entre un pensamiento y otro estás tú y toda tu vida; sin tiempo, sin nadie, sin lastres, sin rumbo, sin cuerdas, sin ruegos, sin miedos. Sin nadie. Nadie más; solo tú. Respiras profundamente y te abrazas a todo lo que queda entre tu afuera y tu adentro.

Una ola avezada te lame los talones y abres los ojos. La noche es bella; casi tan bella como la que guardas dentro. Te incorporas dejando tu hueco en el planeta. Miras al mar y es bello, claro; aún así prefieres relamerte tu propia sal.

No sabes cuánto tiempo ha pasado. Quizá un cuarto de hora, quizá una hora entera. A lo mejor tres o más. Da igual, es como si hubieras vuelto a nacer. Como si tu tiempo empezara ahora mismo, en este mismo momento y pudieras volver a hacerlo siempre que quisieras. Cada noche. Cada instante. Tú decides. Tú.

Te pones de pie sintiendo la seguridad de que nunca, nunca más te vas a fallar.

Sacas el móvil del bolsillo. Buscas en el whatsapp por el nombre a esa persona, el número no te lo sabes.

Ni te planteas si es correcto o no lo que vas a hacer. Solo cuentas con esa seguridad que te ha dado volver a nacer.

Te quiero con todo.

Enviar.

Te llenas de viento. Guardas el móvil sin esperar respuesta, no importa.

Echas a andar en equilibrio por la comisura que deja el agua sobre la arena húmeda de la playa, con unos pies nuevos y una cuerda firme.

El viento y la vida soplan.

la definición la tomamos de la página oficial de la rae.es

La palabra es de algún texto leído, o susurrada por el viento, 
o leída en el twitter de @raepoetica,

 Es para ti, para mí, para quien tú quieras.

Compártela con quien creas que le puede interesar.

La ficción es un espacio de libertad, sin medida, sin doma, sin culpa, sin sentido o quizá
con mucho más que la propia realidad. 
#Abrazosacapazos.  
Félix Albo

P.D. la semana que viene más.
P.D.1. la de la semana anterior aquí.

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